viernes, 9 de julio de 2010

René Magrite en México


Para los que comúnmente hablan del surrealismo, quiero dejar claro el significado y el uso exacto de la palabra surrealismo al momento de su nacimiento.

Surrealismo en francés: surréalisme, sur (sobre, por encima) más réalisme realismo) o superrealismo, es un movimiento artístico y literario que surgió en Francia en la década de los años 20.

André Bretón buscaba descubrir una verdad por medio de la escritura automática sin correcciones racionales, buscaba utilizar imágenes para expresar sus emociones, imágenes creadas sin un mecanismo racional y lógico, a lo que le llamó Automatismo Psíquico.

Algunos datos importantes:
•1916 André Bretón, precursor, líder y gran pensador del movimiento surrealista, descubre las teorías de Sigmund Freud.
•Durante los siguientes años se da un confuso encuentro con el dadaísmo, movimiento artístico precedido por Tristán Tzara, en el cual se decantan las ideas de ambos movimientos, Dadá inclinado hacia la destrucción nihilista y Surréalisme a la construcción romántica.
•1924 Bretón escribe el primer Manifiesto Surrealista y en este incluye lo siguiente:

Indica muy mala fe discutirnos el derecho a emplear la palabra surrealismo, en el sentido particular que nosotros le damos, ya que nadie puede dudar de que esta palabra no tuvo fortuna, antes de que nosotros nos sirviéramos de ella.

Voy a definirla de una vez para siempre: Surrealismo: "sustantivo, masculino. Automatismo psíquico puro, por cuyo medio se intenta expresar, verbalmente, por escrito o de cualquier otro modo, el funcionamiento real del pensamiento. Es un dictado del pensamiento, sin la intervención reguladora de la razón, ajeno a toda preocupación estética o moral."

Filosofía: "El surrealismo se basa en la creencia de una realidad superior de ciertas formas de asociación desdeñadas hasta la aparición del mismo, y en el libre ejercicio del pensamiento. Tiende a destruir definitivamente todos los restantes mecanismos psíquicos, y a sustituirlos por la resolución de los principales problemas de la vida.

Surge entonces como un movimiento poético, en el que pintura y escultura se conciben como consecuencias plásticas de la poesía.

1928, Bretón expone la psicología surrealista: el inconsciente es la región del intelecto donde el ser humano no objetiva la realidad sino que forma un todo con ella.

El arte, en esa esfera, no es representación sino comunicación vital directa del individuo con el todo. Esa conexión se expresa de forma privilegiada en las casualidades significativas (azar objetivo), en las que el deseo del individuo y el devenir ajeno a él convergen imprevisiblemente, y en el sueño, donde los elementos más dispares se revelan unidos por relaciones secretas. El surrealismo propone trasladar esas imágenes al mundo del arte por medio de una asociación mental libre, sin la intromisión censora de la conciencia. De ahí que elija como método el automatismo, recogiendo en buena medida el testigo de las prácticas mediúmnicas espiritistas, aunque cambiando radicalmente su interpretación: lo que habla a través del médium no son los espíritus, sino el inconsciente.

Durante unas sesiones febriles de automatismo, Bretón y Soupault escriben Los Campos Magnéticos, primera muestra de las posibilidades de la escritura automática, que publican en 1921. Más adelante Bretón publica Pez soluble. Dice así el final del séptimo cuento:

"Heme aquí, en los corredores del palacio en que todos están dormidos. ¿Acaso el verde de la tristeza y de la herrumbe no es la canción de las sirenas?"

Por lo tanto y ya finalmente dedicándome a lo que les prometí, René Magritte (1898-1967) artista Belga, es sin duda uno de los principales artistas del movimiento surrealista. La exposición de sus pinturas que en Junio-Julio de 2010 se presentó el Palacio de Bellas Artes en la ciudad de México, me pareció magnífica.

Bajo mi perspectiva y tratando de que mi opinión sea lo menos subjetiva, considero que es difícil descifrar el contenido de las pinturas de René Magritte, las imágenes que representa en sus cuadros no ocultan misterios insondables que normalmente los admiradores del arte en pintura queremos encontrar, en realidad los misterios que representa son misterios evidentes, son figuras misteriosas por sí mismas pero no misteriosas por el deseo mismo del artista.


¿Qué misterios puede ocultar la cara de una persona tapada por una manzana?, tal vez ninguno, sin embargo adquiere más importancia la cara oculta que la manzana misma. Siempre estamos en búsqueda de lo que no vemos, de lo que no podemos obtener pero para aliviar nuestra frustración René Magritte nos recompensa y pareciera que comprendiendo nuestros deseos y nos regala de aquella cara, una mirada apenas perceptible por el rabillo del ojo que asoma en la orilla de la manzana.

René Magritte rechazó el Psicoanálisis escribiendo en alguna ocasión "El psicoanálisis no tiene nada que decir de la obra de arte, que evoca el misterio del mundo. Es el mismo psicoanálisis el que debería psicoanalizarse".

Para el autor, interpretar un símbolo es "desconocer la cosa misma", señala Allmer investigadora del Manchester Institute for Research and Innovation in Art and Design. Para quien ese rechazo es a la vez el de la ideología burguesa pareciera que el artista necesita siempre los símbolos como algo en que apoyarse para no encontrarse de pronto ante el vacío. René Magritte dotó al surrealismo de una carga conceptual basada en el juego de imágenes ambiguas y su significado denotado a través de palabras poniendo en cuestión la relación entre un objeto pintado y el real.

Es un artista rechazó el automatismo psíquico y las posturas de Freud, esto representó una de las causas de su ruptura con André Bretón sin embargo se distinguió por utilizar otras técnicas de creación espontánea típicamente surrealistas como el cadáver exquisito, los "frottages" o "grattages" de Max Ernst o los "fumages" de Wolfgang Paalen.

René Magritte no quiere representar los sueños, Magritte es sueño.

Sus cuadros que despliegan nubes en donde la locación pudiera ser cualquier parte del mundo, rostros voyeur con forma de sexo. L'Empire de la Lumière, II en donde la luz de inconsciente contrasta con la realidad objetiva, lluvia personas que por caer en masa pierden su individualidad convirtiéndose en una unidad, La Folie des grandeurs un cuerpo femenino donde la grandeza se imprime principalmente en sus caderas aunque emocionalmente pareciera una mujer que se siente pequeña refleja claramente los mecanismos psíquicos de las personalidades narcisistas.

Hace más de 10 años en New York, en el MOMA The Museum of Modern Art of New York, estaba admirando las exposiciones que se presentaban, ahí estaba René Magritte con su obra “El Beso” me impactó tanto que lo rechacé, no estaba preparado para asumir y menos entender una realidad tan cruda, hiperrealidad pura.


Luis Buñuel explica a Raquel Tibol en noviembre de 1953: “El surrealismo no es algo inexistente que se agrega a la realidad, no inventa la realidad, la ve más completa; no es algo que hay que buscar, está ahí. El surrealismo era lo que faltaba para completar nuestra visión de la realidad, ya que ésta encierra un sentido extraordinario que hay que descubrir.”

Magritte es un golpe frontal a la realidad, Magritte es hiperrealidad compleja, cruda y sutil.